La Denominación Priorat invita a 40 compradores de EEUU, Japón y China para promocionar sus caldos

CAMPAÑA INTERNACIONAL DE LOS BODEGUEROS

Venta directa en el Priorat . La Denominación Priorat invita a 40 compradores de EEUU, Japón y China para promocionar sus caldos

«La comarca es una referencia vinícola en el mundo», afirman

Miércoles, 25 de mayo del 2011 RAFAEL MORALES

LA MORERA DEL MONTSANT
En tiempos de crisis, una de las salidas es exprimir la imaginación y el casi centenar de bodegas que conviven en el Priorat se han aplicado el cuento. Si los bodegueros no van o no pueden ir donde están los compradores, lo que han hecho es conseguir que ellos vayan a su casa, prueben sus vinos y conozcan la tierra donde se producen. Representantes de 40 de las principales distribuidoras de vino en Estados Unidos, China, Japón y otros países asiáticos y europeos -además de una veintena de periodistas especializados- participaron ayer en la jornada Espai Priorat celebrada en Scala Dei, la cartuja de La Morera del Montsant donde hace unos 800 años los frailes empezaron a cultivar las viñas y a hacer vino.
«El Priorat es el paisaje hecho vino», insistía ayer Salustià Álvarez, presidente del consejo regulador de la Denominació d'Origen Qualificada (DOQ) Priorat, a pesar de que la producción de los 5,3 millones de cepas que tienen solo produjo 4,8 millones de kilos de uva el 2010. A pesar de ello, cuentan con 92 bodegas, 45 de las cuales se esmeraron en dar a probar y explicar las características de sus vinos a los potenciales compradores.
Aunque era improbable que se fraguaran ventas concretas, bodegueros y compradores se mostraron entusiasmados con la insólita iniciativa. «Es muy positiva, pero la experiencia nos dice que hasta dentro de un año no veremos resultados», precisó Robert Veyga, de la bodega Agnès de Cervera (El Molar).
«Esto es más néctar de vino que vino y no se puede beber un Priorat sin saber qué es», explica Veyga, señalando una botella, para intentar hacer entender la singularidad de los vinos que se cultivan en sus escarpadas montañas y justificar los altos precios. «Por eso es muy positivo que hayan venido los compradores aquí para conocer no solo el vino, sino también la tierra donde se hace», añade.
César Basurto, de la firma Southern Wines de Miami, aseguró que los vinos del Priorat «tienen buenas ideas». Se había centrado en probar los blancos, pero lamentó no tener tiempo para conocer las viñas de otras zonas catalanas. «Es verdad que los precios son altos, pero cuando ves el paisaje, las plantas viejas y la producción a mano, te das cuenta de que están justificados», aseguró.
El apoyo de Barcelona
Basurto pone el dedo en una de las llagas que padece la comarca: «Me da la sensación de que Barcelona no le da la mano al Priorat. Estos vinos son para todo el mundo, en Miami se venden muy bien».
También Jordi Bort, director general Institut de la Vinya i el Vi (Incavi), reclama mayor protagonismo para los productos locales cuando afirma que «la calidad de los vinos catalanes es, como mínimo, igual a los del resto de España». Álvarez, mientras, destaca que, aunque la mitad de las bodegas son familiares y la mayoría de poca producción, sus vinos tienen «proyección internacional».

Origen información: El Periódico