Los vinos Parker tiran de Amandi

Los vinos Parker tiran de Amandi

Las bodegas destacadas por el crítico estadounidense fueron las más buscadas. Estrela, Guímaro y Lobeiras llevaron los premios
Pese a que el día amaneció incierto y el pronóstico del tiempo invitaba a presagiar lo peor, la Feira do Viño de Amandi aguantó el tipo una vez más. La edición de este año tuvo el incentivo del revuelo que han generado las altas puntuaciones del crítico más influyente del mundo a dos vinos de esta subzona de la Ribeira Sacra, El Pecado y Algueira. Fuera ya de los designios del todopoderoso Robert Parker, el jurado de cata del certamen decano de la denominación de origen premió las marcas Estrela, Guímaro y Lobeiras. La distinción es la misma para cada una de estas tres bodegas, ya que en el certamen no se establece primer, segundo y tercer premio.
«O de Parker notouse xa dende a primera xornada. Houbo momentos na feira en que non dábamos feito», dice satisfecho Pedro Rodríguez, de la bodega Guímaro, que además de obtener un premio de la feria elabora el vino El Pecado. Las 120 botellas que puso a la venta de esta última marca, al precio de veinte euros la unidad, se acabaron en un abrir y cerrar de ojos durante la mañana de ayer.
Estrela es una bodega familiar, propiedad de Carlos Díaz, situada en Vilachá de Doade, que prepara sus vinos a partir de viñedos propios y que ha obtenido importantes galardones en los últimos años. Por lo que respecta a Lobeiras, la bodega de los hermanos Xesús y Manuel Verao, comercializa la marca Priscilus, un mencía muy personal que se enriquece con pequeñas aportaciones de las variedades albarello y merenzao.
Uno de los puestos más visitados fue el de Algueira, la otra marca de Ribeira Sacra que ha entrado en el club de los 90 puntos Parker en la última cata de vinos españoles de The Wine Advocate . Fernando González, responsable de la bodega, destaca el buen ambiente de la feria. «Cada uno habla según le va en ella, pero creo que las ventas fueron muy buenas a pesar de que quizás hubiera algo menos de gente que otras veces. Van ya 28 ediciones y la gente busca las bodegas en las que ha ido depositando su confianza», señala a modo de balance.
Los comentarios en la comida en la que se procedió a la entrega de premios, en la que se sirvieron vinos de todas las bodegas que acudieron a la feria, apuntaban al aumento en la calidad de los vinos con respecto a otros años. El nivel de los tintos de Amandi de la última cosecha resulta especialmente llamativo si se tiene en cuenta que, con la salvedad de tres o cuatro marcas, la mayoría no llevan ni quince días embotellados.
Orígen información: La Voz de Galicia