Aparece en una botella de champán un tapón de corcho de 1918 fabricado en Girona
Fue fabricado por la compañía Francisco Oller y se ha encontrado durante una degustación en Reims
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| Tapones de corcho de la empresa de Cassà de la Selva en una imagen de archivo (ACN / Xavier Pi / ACN / Xavier Pi) |
Un tapón de corcho fabricado en 1918 por la empresa gerundense Francisco Oller ha aparecido en una botella de champán de la firma Bollinger durante una degustación de botellas antiguas que llevó a cabo esta bodega en la localidad francesa de Reims.
El director general de Francisco Oller, Joan Puig, ha explicado que la cata internacional se realizó hace pocas semanas y que el líquido espumoso había evolucionado "positivamente, tanto en aromas como en preservación del gas".
La firma Bollinger es mundialmente conocida, ya que es el champán que consume el personaje de ficción James Bond en las películas de esta saga.
El hallazgo confirma la documentación que Francisco Oller tenía del envío de tapones a Francia por esa época, "pero una cosa era tener constancia y otra, certeza", ha destacado Joan Puig. Los tapones hallados en la degustación, el más antiguo de 1918, aunque hay otros de fechas posteriores, muestran la relación entre Bollinger y la empresa catalana, que por aquella época tenía también una fábrica en Reims.
Los tapones son de una sola pieza, como era habitual hace un siglo, mientras que hoy el producto es diferente y la elaboración incluye en esta compañía un análisis del interior del corcho para conocer si tiene algún defecto que pudiera afectar al líquido al que protege.
Joan Puig ha detallado que los pedidos de aquella época eran "muy pequeños" y pone como ejemplo que Bollinger fabrica actualmente 2,5 millones de botellas, mientras que entonces apenas superaba las 5.000. Francisco Oller se fundó en 1892 en Cassà de la Selva (Girona), aunque trabajaba desde muchos años antes con el nombre de su fundador, pero sin aparecer constituida como compañía.
Conscientes de la valía del hallazgo, los responsables de Bollinger, que realizaron la cata para conocer la evolución de su champán más antiguo, han remitido los tapones a la empresa catalana. Los descubrimientos de este tipo alcanzan la época romana, ya que se han encontrado ánforas tapadas con corcho, pero Joan Puig precisa que, en aquellos casos, el contenido se ha volatilizado y que, por contra, sobre casos como el de ahora, "en los que el líquido está embotellado, hay poca constancia".
El maestro artesano en la elaboración de este tipo de tapones Eduard Mestres, único reconocido por la Generalitat de Catalunya y que actualmente asesora a Francisco Oller, ha destacado también el estado en el que se encuentran las piezas halladas.
Origen información: EFE- La Vanguardia
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